Los libros y blogs de psicología del trading a menudo hablan de la necesidad de «eliminar» las emociones de las decisiones para obtener resultados más consistentes.
¿Pero realmente puedes eliminar las emociones de la toma de decisiones?
Hans-Rüdiger P fi ster y Gisela Böhm de la Universidad de Bergen argumentan que las emociones NO son fuerzas externas que interrumpen un proceso no emocional de tomar una decisión.
De hecho, creen que la toma de decisiones sin participación emocional no es óptima y tal vez incluso imposible porque las emociones ayudan en cuatro funciones clave en la toma de decisiones:
1. Construcción de preferencias
Cualquier decisión requiere información y el estado emocional de un trader sobre las posibles consecuencias de una decisión puede ayudar a formar preferencias.
Por ejemplo, un trader que elige entre comprar Bitcoin y comprar el dólar estadounidense sopesará el placer de hacer múltiplos de sus inversiones contra el dolor de FOMO y negociar un activo volátil.
De manera similar, un trader que esté pensando en cerrar su operación sopesará el atractivo de maximizar un repunte frente a su disgusto por devolver parte de sus ganancias en caso de que la acción del precio se invierta.
No es relevante si el trader asignó la emoción correcta o incorrecta a la consecuencia. Lo que importa es que sus creencias le proporcionaron información evaluativa que lo ayudó a tomar una decisión.
2. Velocidad
Desde hombres de las cavernas que aprenden a correr ante la vista de un depredador salvaje hasta consumidores que presionan el botón «agregar al carrito» como si no hubiera un mañana en los viernes negros, nuestro estado emocional siempre ha sido un factor en la toma de decisiones dentro de una ventana de oportunidad.
No toda la toma de decisiones rápida implica respuestas emocionales (piense en Tetris). Sin embargo, las emociones pueden ayudar a acelerar el procesamiento de la información.
Digamos que un activo se acerca a un nivel de resistencia clave y Harry, que tiene una posición larga, está ansioso por el debilitamiento del impulso alcista. Debido a que ya está dudoso acerca de la continuación de la tendencia, le resultará más fácil obtener ganancias una vez que vea que la resistencia se mantiene.
3. Asignar relevancia
Todos los tomadores de decisiones evalúan los factores que creen que son relevantes para la situación. La elección de qué factores son relevantes a menudo está guiada por las emociones.
Por ejemplo, un operador que estaba feliz de ganar una operación cruzada de SMA probablemente se centrará en los SMA en lugar de intentar una estrategia diferente.
Del mismo modo, el arrepentimiento de un operador que perdió pips porque no pudo identificar una tendencia a más largo plazo lo llevará a prestar más atención a los múltiples marcos de tiempo en sus próximas operaciones.
Independientemente de que el trader eligiera los aspectos correctos o incorrectos en los que enfocarse, las emociones que atribuyó a factores específicos contribuyeron a tomar una decisión.
4. Compromiso
Otro requisito para tomar una decisión es ceñirse a ella incluso cuando se enfrenta a motivos opuestos.
Tener confianza en un plan de trading, por ejemplo, ayudará a un operador a reducir las pérdidas incluso cuando esté ansioso por cerrar una operación con pérdidas.
La vergüenza por quemar una cuenta también puede motivar a los operadores a usar tamaños de posición razonables, incluso cuando la codicia los empuja a apostar la granja en cada operación.
Los ejemplos anteriores han demostrado que las emociones son una parte tan importante de la toma de decisiones que no podemos simplemente «eliminarlas» o «evitarlas».
No son las emociones en sí mismas las que sabotean nuestras decisiones. El miedo puede hacer que reduzca las pérdidas y la anticipación de una operación ganadora puede motivarlo a ceñirse a un plan de trading.
Esto significa que el objetivo de los traders es no ser indiferentes, sino adoptar las emociones adecuadas a las preferencias que conducirán a decisiones rentables.
