Una de las creencias más comunes en cualquier esfuerzo de alto rendimiento es que la práctica hace la perfección.

¿Y por qué no? El cuerpo generalmente aprende a realizar acciones a través de la repetición. Es decir, si repite una rutina con la suficiente frecuencia, se volverá competente en ella y, finalmente, sus respuestas se volverán automáticas.

La cosa es que la repetición no siempre garantiza el progreso.

Podría estar haciendo las mismas cosas (incorrectas) una y otra vez y aún así (incorrectamente) esperar mejores resultados. Peor aún, podría estar programando su mente y cuerpo para automatizar malos hábitos y convertirlos en la base de sus habilidades.

Imagínese a un nadador a quien se le enseña que solo debe usar un brazo para ejecutar una brazada de espalda. Podía registrar cientos de horas de práctica y tener la mentalidad de un atleta pero, dado que tenía una base de conocimiento pobre, es probable que pierda e incluso sufra lesiones en las competiciones.

De manera similar, un montón de tiempo en gráficos y miles de millones de operaciones no servirán de nada a los operadores de forex si no dominan los conceptos básicos de la gestión de riesgos.

Entonces, ¿cómo sabes cuando no estás dando vueltas en círculos con tus prácticas? A continuación, se ofrecen algunos consejos:

1. Comience con las habilidades básicas

Antes de que uno se convierta en un maestro de ajedrez, primero debe aprender el juego, comprender cómo se mueven las piezas de ajedrez y reconocer las aperturas básicas.

Para los operadores de forex, esto significa dominar las correlaciones económicas y monetarias básicas, identificar tendencias y patrones de gráficos, y conocer los pormenores de la gestión de riesgos.

¡NO HAGA ATAJOS CON ESTA PARTE!

Practica hasta que puedas hacerlo mientras duermes. Estos pueden parecer muchos temas para dominar, pero créanme … estas habilidades fundamentales son realmente necesarias para ser rentables de manera constante.

Una vez que tenga una base sólida, puede trabajar para ser creativo en sus enfoques.

2. Pon a prueba tus habilidades en condiciones realistas

La mejor manera de saber si está practicando buenos hábitos de trading es probar sus métodos en un entorno  real.

Para los principiantes, puede utilizar cuentas  demo para establecer rutinas en la identificación de oportunidades  y realizar operaciones. Pruébelas durante condiciones de mercado volátiles, silenciosas, de tendencia, de rango y cambiantes. Registre los resultados en un diario de trading e identifique qué hábitos y procesos funcionan para usted.

Una vez que haya encontrado un proceso (o dos) que funcione para usted, obtenga una cuenta de operaciones en vivo y comience a realizar operaciones pequeñas y en vivo. Siéntase cómodo con los altibajos emocionales de arriesgar dinero real hasta que pueda ejecutar sus estrategias de trading de manera consistente en diferentes condiciones.

3. Establezca un sistema de retroalimentación

No sabrá qué tan bien o mal lo está haciendo hasta que tenga evidencia de su desempeño. Si no puede medirlo, no puede administrarlo ni mejorarlo. Aquí es donde entra la práctica deliberada.

La práctica deliberada o la disección, revisión y ajuste activos de sus métodos de trading acelera significativamente su proceso de aprendizaje. ¡Incluso puede dar un paso más y seguir los consejos de los entrenadores o de sus compañeros traders!

Si lo hace de manera correcta y consistente, aprenderá a identificar sus fortalezas y debilidades  y trabajará conscientemente para maximizar las primeras y minimizar las segundas.

Recuerde que son buenos traders, no buenas operaciones las que hacen buenos trades. No escatime en el establecimiento de su base de trading.

Más importante aún, no pierda el tiempo practicando malos hábitos. Con la tecnología nivelando el campo de juego, los operadores de forex deben aprovechar cualquier ventaja que puedan obtener.