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Cómo gestionar tu tiempo y no estresarte

Si eres un empresario, lo más probable es que tengas mucho que hacer. Puede que estés haciendo malabarismos con tu negocio y tu vida personal, o puede que ni siquiera sepas por dónde empezar con un nuevo proyecto. En cualquier caso, es importante encontrar el equilibrio adecuado entre el trabajo y el ocio para poder mantener la cordura y seguir haciendo las cosas. En esta entrada del blog trataremos algunas de las mejores formas de que los empresarios gestionen su tiempo sin sentirse estresados todo el tiempo.

1. Planifica tu día la noche anterior.

Planificar tu día la noche anterior es una forma estupenda de prepararte para el éxito. Es fácil sentirse abrumado por todas las tareas que tienes que realizar, pero si planificas el tiempo que te llevará cada una de ellas y cuándo deben completarse, entonces ese estrés puede desaparecer.  

Definitivamente, planificar el día con antelación tiene algunas ventajas. Por ejemplo, no tendrás que ir de un lado a otro por la mañana tratando de encontrar todos tus documentos y archivos porque ya estarán empaquetados para ti. Además, si surge algo imprevisto a lo largo del día, no tendrás que estresarte por ello, porque todo está hecho de antemano. Incluso puedes planificar las comidas de ese día para no tener que pensar en lo que vas a comer a la hora del almuerzo. Esta lista podría ser interminable, pero me detendré aquí porque esto debería dar una idea de por qué es beneficioso planificar el día con antelación.

2. Crea una lista de tareas que sea manejable y realista.

La lista de tareas es una herramienta de gestión del tiempo que utilizan muchos empresarios, pero no todos la utilizan correctamente. Mucha gente comete el error de crear una lista de tareas largas e irreales con un calendario inalcanzable. Esto sólo conduce a la frustración y a la procrastinación.

Ya sea un proyecto de trabajo o las tareas domésticas, parece que siempre hay algo que requiere atención. Por eso, crear una lista de tareas pendientes realista y manejable es esencial para cualquier empresario que quiera seguir siendo productivo. Aquí tienes algunos consejos sobre cómo puedes hacerlo:

  • Anota todo lo que tienes que hacer, incluidas las citas, las tareas del trabajo, los encargos, los recados.
  • Prioriza tus tareas según su importancia.
  • Reserva un tiempo cada día para completar la tarea más importante de tu lista a primera hora de la mañana.
  • Divide las tareas grandes en otras más pequeñas para que sean más manejables.
  • Divide los proyectos más grandes en pasos y divide los grandes objetivos en mini-objetivos con fechas límite.

3. Deshazte de cualquier distracción, incluidas las redes sociales, la televisión o las llamadas telefónicas.

La clave para gestionar tu tiempo es deshacerte de cualquier distracción, incluidas las redes sociales, la televisión o las llamadas telefónicas. También debes asegurarte de que te fijas objetivos y no trabajas en todo a la vez. Esto te permitirá centrarte más en las tareas que necesitan atención ahora mismo para que no se acumulen en una lista interminable. Con estos consejos, puede parecer que las cosas se han ralentizado porque hay menos ruido por todas partes, pero esto puede ayudarte a hacer más cosas con menos estrés.

4. Haz pausas de 5 minutos cada hora para hacer algo relajante.

En el mundo actual, es fácil dejarse llevar por el ajetreo diario de la vida y olvidar lo importante que es tomarse un descanso de vez en cuando. De hecho, son numerosas las ventajas de hacer pausas de 5 minutos cada hora para hacer algo relajante.

Para que no sólo te sientas mejor, sino que también seas más productivo a lo largo de tu jornada laboral, aquí tienes cinco razones por las que hacer pequeñas pausas cada hora te ayuda realmente.

  • Da a tu cerebro la oportunidad de recargarse: Hacer pequeñas pausas durante el día puede ayudarte a mantenerte concentrado y permitirte unos momentos fuera de lo que estás haciendo, de modo que cuando vuelvas, tu cerebro estará recargado y listo para lo que venga a continuación en tu agenda.
  • Eres más productivo: Las pausas te ayudan a procesar lo que está ocurriendo en la sala y a despejar la cabeza, lo que hace que al volver te centres aún más en mejorar la productividad.
  • Tienes mejor humor. Es fácil agobiarse cuando estamos trabajando constantemente en nuestro escritorio todo el día, sin pausas ni actividades a la hora de comer, como socializar con los compañeros de trabajo entre las tareas; esto provoca un aumento de la cantidad de cortisol (la hormona del estrés) que puede llevar a tener pensamientos negativos sobre uno mismo, como la sensación de que «no soy lo suficientemente bueno».
  • Tu creatividad aumenta: Te ayuda a alejarte de lo que está ocurriendo para despejar el espacio mental y pensar de forma creativa, ¡lo que puede dar lugar a nuevas ideas!
  • Es bueno para tu salud: Esto se debe a que te da tiempo para el autocuidado. Hacer estas pequeñas pausas ayuda a rejuvenecer, a recargar y a restablecer los límites entre las jornadas de trabajo para que no nos quememos demasiado rápido.

5. Prioriza lo que hay que hacer primero.

Nunca es fácil saber qué hay que hacer primero. Siempre hay muchas tareas en nuestro plato, y puede parecer imposible priorizarlas. ¡Pero hay ayuda! Sigue estos tres pasos para priorizar tu día.

  • Anota todas las cosas que necesitas o quieres hacer hoy, por grandes o pequeñas que sean: Así, cada día tendrá un plan de acción y las tareas restantes se harán sin tener ninguna ansiedad por olvidar algo. Cuando sabes lo que hay que hacer cada día es mucho más fácil. La mejor manera es escribir todo en un papel o en una aplicación como Google Keep o Evernote, y marcarlo a medida que se va completando. Esto te permite ver de un vistazo si hay acciones pendientes que pueden no ser urgentes, pero que deben completarse antes de que termine la jornada laboral.
  • Elige una tarea que sea la más importante y ponla al principio de la lista. Quieres que este elemento esté en la parte superior porque, una vez completado, liberará tiempo para otras tareas de tu lista que son menos urgentes que las que están cerca de la parte inferior. Esta técnica también te ayuda a mantener la motivación a lo largo del día, ya que trabajas para completar un objetivo en lugar de abordar otra cosa de tu interminable lista.
  • Repite este proceso subiendo las demás tareas que deban hacerse antes que las demás en orden de importancia. Ahora ya estás preparado para hacer algunas tareas.

Con estas sencillas y eficaces tácticas de gestión del tiempo, puedes controlar tus niveles de estrés y no sentirte abrumado por las tareas que debes realizar. Si quieres cambiar tu futuro, actúa ahora. Únete hoy mismo al Reto $10k Mensuales.

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