¿Alguna vez has sentido que no eres lo suficientemente bueno? ¿Que todos los que te rodean tienen más éxito que tú y lo tienen más fácil? Es muy fácil compararse con los demás, pero la verdad es que nadie tiene una vida perfecta. Tú eres tu propia persona, con tus propios puntos fuertes y débiles. La única persona que puede mejorar tu vida eres TÚ. Entonces, ¿cómo podemos llegar a tener confianza en nosotros mismos? He aquí algunos consejos.
1. Comprende que eres tu propia persona y que nadie puede quitarte eso.
En el mundo en que vivimos, puede ser difícil sentir que tienes voz. Es fácil sentirse desanimado por los demás y por lo que piensan de ti. Pero una cosa que es cierta es que TÚ eres tu propia persona: nadie más tiene el poder de quitarte lo que realmente eres.
El primer paso para recuperar tu vida de aquellos que intentan controlarla para sus propios fines, es comprenderte mejor a ti mismo. Hay muchas partes de nosotros que conforman todo nuestro ser, algunas conocidas y otras desconocidas. Comprender estas partes puede ayudar a tener una mejor relación con nosotros mismos, así como a orientar a los demás sobre cómo deben interactuar con nosotros.
2. Cree en ti mismo: si tú no crees en ti mismo, ¿quién lo hará?
Seguro que todos hemos oído la frase «si tú no crees en ti mismo, ¿quién lo hará?» demasiadas veces para contarlas. ¿Pero qué significa realmente? En pocas palabras, significa que si tú no confías en tus capacidades y habilidades, nadie más lo hará tampoco. Depende de ti saber que vales algo, porque cualquiera puede desanimarse en la vida de vez en cuando. Tienes que ser capaz de mantener la cabeza alta y sacar lo mejor de cada situación porque recuerda: si tú no crees en ti mismo, ¿quién lo hará?
3. Recuerda ser amable con los demás porque la amabilidad es contagiosa.
Todos somos culpables de ser malos con los demás, pero ¿y si te dijéramos que un solo acto de amabilidad podría cambiar tu vida? Las investigaciones han demostrado que cuando las personas son amables con los demás, su estado de ánimo tiende a mejorar. Esto se debe a que el cerebro libera dopamina, que nos hace sentir bien. Pero la cosa no acaba ahí. Cuando alguien hace algo amable por ti, libera oxitocina, que le ayuda a establecer un vínculo contigo y provoca sentimientos de confianza. Así que la próxima vez que alguien te pida ayuda o te ofrezca su asiento en el autobús, no te apresures a decir que no. A la larga, ambos se sentirán más felices.
4. Encuentra interesante la felicidad de los demás en lugar de encontrarla amenazante.
Cuando la felicidad de los demás te resulta interesante en lugar de amenazante, es mucho más fácil vivir la vida con más plenitud. Puedes conseguirlo practicando la gratitud y estando atento. Para tener una mente feliz, tenemos que estar agradecidos por lo que tenemos y no compararnos con otras personas que puedan parecer mejores en algún aspecto. Cuanto más tiempo dediques a vivir tus propios valores, a apreciar lo que tienes delante y a dejar de lado los pensamientos o las relaciones tóxicas, ¡más feliz será tu cerebro!
5. Sé consciente de lo que dices sobre otras personas o sus logros.
En su libro «Los Cuatro Acuerdos», Don Miguel Ruiz habla de los peligros de cotillear y hablar negativamente de los demás. Cree que es una forma de manipulación y puede provocar resentimiento en las relaciones. Hay muchas maneras de que la gente exprese sus opiniones sobre otras personas o sus logros sin recurrir a un lenguaje negativo que pueda causar daño.
Cuando menospreciamos a los demás, es un reflejo de nosotros y no de la persona a la que criticamos. A menudo lo hacemos como una forma de sentirnos mejor, pero a la larga sólo nos perjudica, porque esos sentimientos de inadecuación se quedan dentro de nuestra cabeza y pueden causar depresión.
6. Celebra tus propios logros sin compararlos con el éxito de otra persona.
Es importante celebrar tu propio éxito y no compararlo con el de los demás. Puede ser fácil sentir que nunca eres lo suficientemente bueno porque, pase lo que pase, alguien siempre tendrá más seguidores que tú o una casa más grande. Pero no hay nada de malo en el lugar donde estás en la vida y en lo que has conseguido hasta ahora. Has hecho grandes cosas y la única forma de seguir avanzando es celebrando nuestros logros sin dejar de intentar cosas nuevas.
Puede ser difícil mantener un sentimiento de confianza en uno mismo mientras navegamos por los obstáculos y desafíos que la vida nos depara. Pero vale la pena recordar que eres tu propia persona con talentos y habilidades únicas. ¡Tienes mucho potencial para hacer grandes cosas en este mundo! Si sientes que tu confianza ha caído en picado últimamente, prueba a utilizar estos consejos y trucos para mejorar tu estado de ánimo y volver a encontrar la felicidad. Y no olvides compartirlos también con los demás: ¡la bondad es contagiosa!