Internet ha hecho posible que la gente trabaje desde cualquier lugar. Para algunos, es una oportunidad de dejar su trabajo diario y ganar dinero aparte. Para otros, es posible iniciar un negocio con muy poca inversión o gastos generales. Esta entrada del blog hablará de cómo puedes dejar tu trabajo diario sin dejar tu vida.

1. Crea un plan para sustituir tus ingresos.

Quieres dejar tu trabajo diario, pero primero necesitas un plan sobre cómo reemplazarlo, te mostraremos cómo crear un plan para sustituir tus ingresos y prepararte para cuando la vida cambie de forma inesperada.

• Haz una lista de tus gastos mensuales.
• Calcula cuántos ingresos necesitarás para mantener el mismo estilo de vida.
• Determina de qué activos y ahorros dispones para cubrir cualquier déficit.
• Desarrolla un plan que te ayude a alcanzar tu objetivo: esto podría incluir iniciar un negocio paralelo, aceptar trabajos por cuenta propia o a tiempo parcial, o solicitar nuevos puestos en tu campo.
• Poner en marcha el plan y controlar el progreso a lo largo del tiempo para asegurarte de que funciona como se espera.
• Actualiza tu plan cuando la vida vuelva a cambiar: si pierdes un activo, cambias de trabajo, te jubilas antes de tiempo, etc., prepárate con otra estrategia de respaldo para que no haya sorpresas en el futuro.

2. Averigua qué quieres hacer con el tiempo que no estás trabajando.

Si quieres dejar tu trabajo diario, pero no sabes qué quieres hacer con el tiempo que no dedicas al trabajo, puede ser útil que pienses en cómo utiliza la gente su tiempo libre. ¿Qué hacen? ¿Cómo se sienten de motivados y realizados durante esas horas de ocio? Tal vez haya un campo o una carrera en la que alguien pueda pasar más de dos tercios de sus horas de vigilia dedicado a una actividad significativa.

Averigua qué es lo que más te importa y persigue esa pasión. Serás más feliz y te sentirás más realizado en ambos lados del espectro trabajo/vida si eres capaz de convertir tus días libres en algo digno de celebración en lugar de otro temido despertador del lunes que suena a las 5 de la mañana.

3. Considera cuánto dinero necesitarás para vivir y crea un presupuesto.

Tu trabajo diario puede ser un lastre, pero no tiene por qué arrastrarte. Si la idea de volver a trabajar de nueve a cinco te revuelve el estómago y te da vueltas la cabeza, ¡no te preocupes! Todavía hay formas de solucionar esta situación no tan divertida de la vida que pueden traducirse fácilmente en más tiempo libre con la familia o simplemente en explorar lo que existe alrededor de la ciudad a pie, mientras te ganas la calderilla de donde sea posible fuera de las horas de trabajo si es necesario. Sin embargo, para empezar necesitaremos primero algunos números: ¿Cuánto dinero tengo previsto para vivir cada mes? ¿Qué porcentaje querría que superara mi cuenta de ahorros a la edad de jubilación (suponiendo de nuevo 20 años hasta entonces)? Crea un presupuesto y averigua cuánto dinero será suficiente para los gastos de subsistencia.

4. Busca otras formas de ganar dinero, como trabajar por cuenta propia o iniciar un negocio paralelo.

¿Odias tu trabajo diario? ¿La idea de ir de un lado a otro del trabajo cada noche te produce ansiedad o estrés, sabiendo que pronto llegará de nuevo el momento de cobrar el sueldo? Bueno, si esto te suena a algo que todos sentimos, no te preocupes, ¡porque hay algunas salidas estupendas! Por ejemplo: trabajar por cuenta propia; crear un negocio con muy poca inversión/escala – estas dos opciones podrían darnos la libertad de no tener ningún tipo de vínculo con una trayectoria profesional existente a toda costa, mientras creamos nuestras propias reglas en lo que respecta a los ingresos.

5. Asegúrate de que tu pareja está de acuerdo antes de dejar el trabajo.

Si estás pensando en dejar tu trabajo diario para montar un negocio o perseguir tus pasiones, asegúrate de que es con el pleno acuerdo de tu pareja. Esto puede parecer de sentido común, pero según nuestra experiencia, muchas personas no discuten este importante detalle y acaban discutiendo o, peor aún, divorciándose porque su cónyuge no quiere que se vayan a trabajar por su cuenta.

Una buena forma de abordar estas conversaciones es preguntarse: «¿Qué pasaría si dejara mi trabajo diario? ¿Qué cambiaría en nuestra vida en común?» Asegúrate de haber discutido todos los aspectos de lo que sucederá cuando una persona deje su carrera por otra. No querrás que haya sorpresas una vez que ambos estéis comprometidos.

6. No renuncies demasiado rápido: date al menos seis meses para que sea más fácil encontrar otro trabajo si es necesario.

Si estás buscando un trabajo, a veces puede ser difícil encontrar el perfecto que se adapte a tus necesidades e intereses. Si no estás contento con tu situación actual o si crees que necesitas más tiempo para decidir si es el lugar adecuado para ti, te sugerimos que te tomes un tiempo antes de tomar decisiones precipitadas. Considera la posibilidad de darte al menos seis meses para explorar otras opciones y asegurarte de que esto es lo mejor para tu futuro.

Puede dar miedo dejar tu trabajo diario, pero no es imposible. Si sigues estos seis pasos y consultas con tu pareja antes de dejarlo, te resultará mucho más fácil encontrar otro trabajo si es necesario. Lo más importante es que crees un plan para lo que viene después, para que la transición sea lo más fácil posible ¿Qué cosas de esta lista se aplican o no a tu situación? ¡Háznoslo saber en los comentarios de abajo!