El proceso de fijación de objetivos es una forma poderosa de convertir tus sueños en realidad. El proceso implica dos pasos: crear objetivos y alcanzarlos. Esta entrada del blog te enseñará cómo establecer objetivos de tal manera que sean alcanzables y realizables en el plazo de 90 días o menos:
1. Escribe tu objetivo.
Alcanzar los objetivos puede ser difícil, pero es posible. Escribir tu objetivo te ayuda a mantener el rumbo y a centrarte en lo que quieres para ti. Es importante saber para qué estás trabajando, porque hará que el viaje sea más satisfactorio cuando llegues al punto final. Cuando escribas tu objetivo, ten en cuenta que debe ser algo por lo que merezca la pena esforzarse.
2. Crea un calendario para alcanzar tu objetivo.
Una forma sencilla de alcanzar tu objetivo es crear un calendario procesable. Cuanto más específico sea, mejor, así que es importante que seas creativo sobre el tipo de actividades que pueden encajar en este periodo de tiempo e incluir cosas como ver la televisión o leer también. Asegúrate de que hay fechas programadas con antelación, tanto con puntos de partida (por ejemplo, hoy) como con la duración de cada una de ellas, por ejemplo, «2 horas» en lugar de indicar sólo «un día».
3. Ponte una fecha límite.
Fija una fecha límite para tu objetivo para asegurarte de que lo alcanzas. Mucha gente no se da cuenta de lo importante que es este paso, pero si no hay una fecha final en mente, el progreso puede estancarse y la frustración aumentará rápidamente, tanto mentalmente (porque no se hace nada) como físicamente (podrías abandonar). Así que establece unos parámetros firmes sobre lo que tiene que ocurrir y cuándo.
4. Divide los pasos que tienes que dar para alcanzar tu objetivo en tareas pequeñas y manejables que puedan completarse en 90 días.
Divide tu objetivo en tareas pequeñas y manejables que puedan completarse en 90 días. Establece un punto final (fecha) y luego averigua lo que hay que hacer para el día xxx antes de que ocurra, de modo que cuando se acerque la fecha de finalización la tarea sea más manejable.
5. Establece un sistema de rendición de cuentas, contando a alguien tus objetivos y solicitando su ayuda para mantenerte en el camino (correo electrónico, mensaje de texto, llamada telefónica).
Establecer un sistema de rendición de cuentas contándole a alguien tus objetivos y pidiéndole ayuda te mantendrá en el camino. Establecer una cuenta de correo electrónico es una opción, pero hay muchas formas diferentes de ponerse en contacto con amigos o familiares que pueden prestarte apoyo cuando lo necesites.
6. Lleva la cuenta de lo que has conseguido cada día hasta ahora y celebra los hitos alcanzados.
Los beneficios de llevar la cuenta de lo que has conseguido cada día hasta ahora y celebrar los hitos son tres.
- La primera es que mantiene tu impulso, lo que a su vez hará que alcanzar nuevos objetivos sea más fácil que si se dejan sin atender u olvidan por completo.
- La segunda razón para dedicar tiempo a reflexionar sobre nuestros éxitos se encuentra en lo más profundo de la naturaleza humana; al fin y al cabo, la mayoría de la gente necesita algún tipo de validación, ya sea a través de la aprobación de otras personas que se preocupan profundamente (padres/profesores) o simplemente recibiendo ellos mismos las felicitaciones al alcanzar ciertas cimas en el accidentado camino de la vida, antes de sentir finalmente que «¡he conseguido algo!».
- Finalmente hay una liberación emocional provocada por el reconocimiento.
Establecer objetivos y alcanzarlos es uno de los sentimientos más gratificantes. Si no estás seguro de cómo establecer un objetivo, o si tus objetivos actuales son demasiado elevados para 90 días, intenta dividirlos en tareas manejables que puedan completarse en ese plazo. Utiliza los consejos que hemos proporcionado aquí como esquema para establecer objetivos alcanzables en 90 días, de modo que puedas progresar en lo que más te importa.