No es de extrañar que la mayoría de los empresarios sean adictos al trabajo. Parece un tópico, pero es cierto. Siempre estamos buscando formas de mejorar nuestro producto o servicio, ser más eficientes con la gestión del tiempo, etc. Pero a veces vamos demasiado lejos y acabamos trabajando en lugar de vivir la vida. Es importante equilibrar tu negocio con el resto de tu vida porque, a la larga, tendrás más éxito si te cuidas primero a ti mismo. Así que aquí tienes algunos malos hábitos que debes evitar al dirigir un negocio para poder vivir la vida sin dejar de ser productivo. Aquí están:
1. Trabajar los fines de semana.
Si eres como la mayoría de los empresarios, lo más probable es que pases la mayor parte de los fines de semana, si no todos, trabajando. Puede que pienses que esto es algo bueno porque significa más tiempo en el trabajo y menos tiempo de inactividad, pero en realidad está haciendo que tu productividad se vea afectada. Evitar trabajar los fines de semana tiene muchos beneficios, he aquí tres de ellos.
- El aumento de la productividad.
- La mejora de la calidad de vida.
- La mejora de la salud mental.
2. No tomar vacaciones.
No tomar vacaciones puede tener un gran impacto en tu vida laboral y personal. No sólo tienes más probabilidades de enfermar, sino que también puede conducir al agotamiento. Un estudio descubrió que los trabajadores que se tomaban dos semanas de vacaciones al año tenían un 20% menos de estrés que los que no se tomaban nada de tiempo libre. Además, ¡eran un 10% más productivos mientras trabajaban! Así que no descuides el resto de tu persona para tener éxito: ¡asegúrate de que también te cuidas!
3. Ignorar a la familia.
En el mundo empresarial se discute mucho sobre la importancia del equilibrio entre el trabajo y la vida privada. Muchos empresarios sienten que deben centrar todo su tiempo y energía en su negocio para tener éxito. Sin embargo, lo que a menudo se descuida en esta ecuación es la familia. Para tener éxito de verdad, es importante crear un buen equilibrio entre el trabajo y la vida que incluya a tu familia. He aquí algunas razones por las que ignorar a tu familia puede perjudicar a tu negocio a largo plazo.
- Los miembros de la familia pueden ayudarte mucho en tu negocio.
- Tu familia puede tener conexiones que serán útiles para tu empresa.
- Te arrepentirás de no haber pasado tiempo con ellos cuando se hayan ido.
- Son los únicos que te conocen como algo más que un simple hombre o mujer de negocios.
- Pasar tiempo con ellos es bueno para tu salud emocional y tu bienestar mental.
- Si te ocurre algo, tendrán que hacerse cargo de la dirección de la empresa, si es lo suficientemente pequeña, así que es mejor enseñarles cómo hacerlo ahora, mientras tú aún estás presente.
4. Delegar todo.
Puede ser tentador delegar todo porque estás ocupado o quieres hacer otras cosas. Pero hay muchas ventajas de evitar delegarlo todo, como poder tener más control sobre el proyecto y tu tiempo, que los errores de otra persona no te afecten a ti, y poder encargarte de tareas que te gustan.
La vida del empresario es un interminable tira y afloja entre el negocio y las responsabilidades personales. Un dilema común para los empresarios es la decisión de externalizar o no algunas tareas. Hay pros y contras en ambas opciones, pero todo se reduce a cuáles son tus objetivos y expectativas como empresario. Si te interesa mantener el control sobre los aspectos de tu negocio, entonces mantente al tanto de todo tú mismo en lugar de delegar responsabilidades. Externalizar ciertas tareas puede ser ventajoso si quieres tener más tiempo libre o simplemente necesitas que otra persona con conocimientos especializados se encargue de algo que normalmente te llevaría demasiado tiempo a ti personalmente. En cualquier caso, una cosa sigue siendo cierta: ¡emprender no es fácil!
5. Esconderse de los problemas.
Hay momentos en los que todos queremos ignorar nuestros problemas y esperar que desaparezcan por sí solos. Los problemas en el trabajo, los problemas de pareja o los problemas económicos pueden parecer abrumadores y demasiado difíciles de afrontar. Pero la verdad es que ignorar tus problemas no hará que desaparezcan; de hecho, sólo empeorará las cosas. Si estás luchando contra un problema, lo mejor que puedes hacer es enfrentarte a él y tratar de encontrar una solución. Actuar puede ser difícil, pero siempre es mejor que no hacer nada.
Como empresario, te enfrentas constantemente a nuevos problemas. Ya sea un cliente que no está contento o unos plazos que hay que cumplir, siempre pasa algo. No importa cuántas veces hayas estado en esta situación antes, el problema nunca se hace más fácil de tratar. Puede ser fácil que tu mente entre en modo pánico y sientas que todo se derrumba a tu alrededor. Para evitar que estos sentimientos de ansiedad y estrés se apoderen de tu día, aquí tienes algunos consejos para resolver los problemas habituales a los que se enfrentan los empresarios:
- Gestionar el tiempo – Si eres como la mayoría de los empresarios, siempre estás haciendo malabarismos con un millón de cosas diferentes a la vez. Y si no tienes cuidado, eso puede provocar graves problemas de gestión del tiempo. He aquí algunos consejos que te ayudarán a tener tu vida y tu trabajo bajo control:
- Asegúrate de que te tomas tiempo para ti.
- Anota lo que hay que hacer y luego prioriza las tareas.
- Crea una rutina que te funcione.
- Sé sincero contigo mismo sobre la cantidad de trabajo que es demasiado.
- Aprende a decir «no» cuando sea apropiado.
- Manejar el estrés – El estrés es una parte natural de la vida. Puede ser útil para motivarnos a actuar, pero cuando se vuelve demasiado, puede ser perjudicial tanto mental como físicamente. Aquí tienes algunos consejos útiles sobre cómo afrontar el estrés de forma saludable. Si sigues estos consejos, podrás mantener tus niveles de estrés bajo control y mejorar tu calidad de vida en general:
- Identifica y prioriza tus objetivos.
- Prioriza las tareas más importantes de tu lista de tareas pendientes.
- Establece plazos realistas para ti mismo.
- Haz un plan para abordar una tarea cada vez, en lugar de intentar hacerlas todas a la vez.
- Dedica un tiempo diario para centrarte en tus intereses o aficiones personales.
- Pide a otra persona que se encargue de las pequeñas tareas de las que no tienes que preocuparte en este momento, como pagar las facturas o cuidar de las mascotas.
- Encontrar a los empleados adecuados – Como empresario tienes que encontrar personas cualificadas y que tengan la misma visión y objetivos que tú. Aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a encontrar los empleados adecuados para tu empresa:
- Busca candidatos con las habilidades y la experiencia necesarias.
- Examina bien a los candidatos para eliminar las manzanas podridas.
- Asegúrate de que los candidatos comparten la visión y los valores de tu empresa.
- Realiza las entrevistas con cuidado para hacerte una idea de la personalidad y la ética de trabajo de los candidatos.
- Comprueba las referencias antes de tomar una decisión definitiva.
- Ofrece un salario competitivo y un paquete de beneficios para atraer a los mejores talentos.
No puedes crecer y prosperar como empresario si no te tomas tiempo para ti. Si estás pensando en crear un negocio propio o en emprender una actividad secundaria como empresario, asegúrate de planificar las vacaciones y el tiempo en familia, además de todo lo demás. Lo último que necesita un empresario es más estrés. No dejes que la evasión de los problemas se convierta en un hábito, sino que busques soluciones. Si quieres cambiar tu futuro, el primer paso es tomar medidas ahora. Y una de las mejores maneras de tomar el control hoy y prepararte para el éxito en el futuro es unirte a nuestro Reto $10k Mensuales. ¡Únete hoy!