La palabra «fracaso» puede ser muy dura, pero todos cometemos errores y aprendemos de ellos. Es la oportunidad perfecta para mejorar y convertir nuestras derrotas en victorias. Aquí tienes 7 formas de aprender de tus fracasos:
1. Acepta que has fracasado.
Si has fracasado, la mejor manera de seguir adelante es aceptándolo. Es importante porque si no aceptamos nuestros fracasos en la vida, nunca habrá paz mental ni comodidad con nosotros mismos cuando volvamos a enfrentarnos a otro reto de frente; sin embargo, algunos no dan este paso hacia la recuperación, lo que le lleva a uno por un camino aún más oscuro que antes, en el que la esperanza se pierde entre la duda y el miedo.
2. Averigua qué ha fallado.
¿Cómo te sientes ante el fracaso? No sé muy bien por qué la gente se encoge cuando oye la palabra «fracaso». Por alguna razón, es como una insignia de honor, pero también tiene connotaciones negativas. Tal vez sea porque no nos tomamos tiempo después de que un intento de algo fracase y analizamos lo que ha ido mal para poder dar los siguientes pasos en nuestro camino hacia el éxito, en lugar de rendirnos sin pensar en cómo se podrían haber mejorado las cosas o evitarlas por completo.
3. Aprende de la experiencia.
Es importante aprender de tus errores y fracasos. Si no lo intentas, ¿cómo sabremos si fue una buena idea o no?
Los beneficios de fracasar son muy variados: pueden enseñarnos valiosas lecciones, como lo que no funciona; hacernos más fuertes al superar nuestras zonas de confort (y descubrir otras nuevas); ayudar a crear confianza antes de volver a emprender otro gran reto; entre otros.
4. Haz un plan.
Cuando fracasas, es importante no sólo aprender de tus errores, sino también elaborar un plan de acción para el éxito. La planificación evita el pánico, ya que nos permite tener tiempo para fijar objetivos con antelación, de modo que cuando las cosas salgan mal o no funcionen exactamente bien no haya mucha sorpresa al respecto, lo que, con suerte, evitará cualquier trauma emocional que conlleve.
5. Vuelve a levantarte.
«Si al principio no tienes éxito, inténtalo de nuevo».
A veces en la vida no parece que merezca la pena el esfuerzo, pero cuando algo es lo suficientemente importante como para perseverar en ello aunque haya obstáculos que se interpongan en tu camino, puedes rendirte o seguir intentándolo con todas tus fuerzas hasta conseguir finalmente lo que queremos, sin importar el tiempo que nos lleve, ¡porque nada sienta mejor que tener éxito!
6. Sigue adelante.
No importa lo cerca que estés del fracaso, siempre existe la posibilidad de triunfar. El secreto reside en ser lo suficientemente capaz y persistente como para no sólo levantarse, sino también para tomar lo que es tuyo.
7. Repite lo que sea necesario hasta que tengas éxito.
El fracaso de una persona en la vida no se debe únicamente a que no se haya esforzado lo suficiente; a veces, puede ser una ventaja repetir una tarea hasta conseguirlo. Mucha gente teme arriesgarse con lo que le interesa, porque sus miedos suelen ser mayores que la recompensa si las cosas les salen bien.
Muchos deportistas practican una y otra vez antes de la competición, al igual que hacen los cantantes o los músicos cuando preparan la música en el piano o la guitarra, pero algunos pueden dejarse desanimar demasiado pronto después de empezar sin ningún éxito al principio. CONSEJO: Asegúrate de que nunca llegará un momento en el que rendirse suene mejor que seguir adelante.
No puedes tener éxito sin fracasar, y es importante aprender de tus errores. Pon en práctica estos 7 consejos la próxima vez que experimentes un fracaso para volver a levantarte más rápido que nunca. Haznos saber cómo te ha ayudado este post a aprender de tus fracasos comentando a continuación.