¿Tienes un objetivo que te ronda la cabeza desde hace tiempo? Si es así, esta entrada del blog es perfecta para ti. Compartirá 7 hábitos de las personas que logran sus objetivos y cómo puedes empezar a aplicarlos para ayudar a hacer realidad tus objetivos. Descubrirás lo que se necesita para mantenerse motivado y centrado, y explorarás la importancia de tener un buen sistema de apoyo detrás de ti.
1. Tener un plan.
Si quieres conseguir tus objetivos, es importante tener un plan. ¿Por qué ibas a empezar algo sin conocer el objetivo final? Es como ir en coche a algún sitio sin tener un destino en mente. Puede que al final llegues, pero te llevará mucho más tiempo y será más estresante que si hubieras planificado tu viaje con antelación.
Las personas que logran sus objetivos saben lo que quieren conseguir y han desarrollado una estrategia para llegar a ello. Sigue estos cinco pasos para poner en marcha tu propio plan de consecución de objetivos:
- Conoce lo que quieres.
- Crea un plan de acción.
- Divídelo en partes manejables.
- Encuentra compañeros de responsabilidad.
- Céntrate en el resultado.
2. Hacer el trabajo.
Las personas que logran sus objetivos hacen el trabajo. Van tras lo que quieren y no dejan que nada les impida alcanzar su objetivo o sueño. Si eres una persona que no tiene mucho éxito en la vida, es hora de que te examines bien a ti mismo, a tus hábitos y a cómo pasas el tiempo. Al principio puede parecer una batalla difícil, pero si estás dispuesto a ponerte a trabajar, ¡todo es posible!
3. No perder de vista el premio.
Hay muchas razones por las que la gente abandona sus objetivos. Puede que estén demasiado ocupados, que no estén lo suficientemente centrados o que simplemente no sepan lo que realmente quieren hacer. Hay una razón importante de la que la mayoría de la gente se olvida y que es la más fácil de solucionar: establecer expectativas realistas para sí mismos.
La cosa número uno que puede llevar a una persona por el mal camino en la consecución de su objetivo es establecer expectativas poco realistas para sí misma. Las expectativas poco realistas suelen provenir de la falta de comprensión de la cantidad de trabajo que hay que realizar para conseguirlo. Este tipo de pensamiento conduce al desánimo cuando la realidad no coincide con lo que se esperaba a primera vista, lo que hace que se abandone el objetivo por completo.
4. Mantenerse motivados.
La razón por la que las personas que logran sus objetivos se mantienen motivadas es porque siempre buscan nuevas formas de motivarse. La motivación es la clave del éxito y, sin ella, nadie puede alcanzar todo su potencial. Aquí tienes algunas formas de mantener tu motivación:
- Mantén una actitud positiva. Alcanzar cualquier objetivo es difícil, pero es mucho más probable que lo consigas si tienes una actitud positiva al respecto desde el principio.
- Si la motivación empieza a decaer, prueba con técnicas de autoconversación o visualización. Cree en ti mismo y visualízate alcanzando tus objetivos.
- Tómate un tiempo para reflexionar al menos una vez a la semana: ¿Qué ha ido bien? ¿Qué no ha ido como estaba previsto? Toma nota de estas preguntas para poder hacer un seguimiento de lo que hay que mejorar y cambiar las cosas la próxima vez.
5. No rendirse.
Las personas que logran sus objetivos no se rinden. Están más decididas a hacer todo lo posible para conseguir lo que quieren. Todo depende de las pequeñas cosas que hagas cada día y del esfuerzo que pongas en ellas, lo que determina si tendrás éxito o no. Tienes que ser capaz de aceptar las críticas constructivas, aprender de tus errores, negarte a que alguien se interponga en tu camino para conseguir lo que quieres y no conformarte nunca con menos que algo mejor. Si alguien dice «no», sigue intentándolo hasta que alguien diga «sí». Nunca dejes de luchar porque al final todo valdrá la pena.
6. Cuidarse haciendo ejercicio y durmiendo lo suficiente.
Las personas de éxito toman decisiones saludables porque comprenden la importancia de cuidarse. Alcanzar un objetivo es algo más que esforzarse; también se trata de cuidar de ti mismo para que puedas seguir alcanzando el éxito. Una actitud displicente sólo provocará agotamiento, lo que lleva a ser menos productivo en lo que realmente importa. El ejercicio ayuda a proporcionar energía y aumenta tus niveles de productividad, por no mencionar que nos hace sentir mejor cuando se hace de forma constante a lo largo del tiempo (¡no es broma!). Dormir ayuda a nuestro cuerpo a recuperarse del día y hace que sea más probable que hagamos bien las tareas futuras, ya que restablece los niveles de energía cada mañana para que podamos afrontarlas de frente.
7. Rodearse de personas que les apoyan y que también quieren alcanzar sus objetivos.
Los beneficios de un entorno de apoyo y ambición son innumerables. Rodearte de personas que quieren los mismos objetivos que tú sólo hará que tu vida sea más satisfactoria, ¡si no más fácil en algunos casos!
La ciencia ha demostrado que las personas que logran sus objetivos son muy diferentes a la persona media. Si quieres conseguir tus objetivos, empieza por adoptar uno o varios de estos hábitos en tu rutina diaria hoy mismo. Pueden parecer pequeños, pero pueden tener un gran impacto en tu éxito. ¿Qué hábito has elegido?